sábado, 17 de marzo de 2012

Capítulo 9

Mas ha tardado Tom en separarse, que en volver a unir nuestros labios en un segundo beso... Que a diferencia de el primero este me transmite tanto, es un beso lleno de intensidad y de lujuria, lleno de pasion y desesperación... Tom me sujeta firme y me acerca a su cuerpo envolviendome con un brazo por detrás de la cintura mientras con el otro acaricia mi cabello con algo de desesperación, me da la impresión que lo jalara en cualquier momento. me tiene tan firmemente aferrada a el que puedo sentir absolutamente todo su cuerpo, desde su fuerte y marcado abdomen hasta su masculinidad golpeando mi entrepierna, si. Asi es. Tom esta bastante exitado... Agradezco infinitamente que la noche nos envuelva, ocultandonos de todo y todos al rededor, aunque ahora mas bien parece que nos encontramos solos, abandonados por la humanidad, libres de hacer lo que queramos... No quiero que esto pare, no quiero dejar sus labios, esos labios tan seductores, perfectamente esculpidos... pero se hace necesario a falta de esa odiosa cosa llamada ¡Oxigeno!.
Las palabras sobran, no logro recuperar bien el aliento cuando Tom toma mis labios nuevamente con desespero, me empuja ágilmente recargandome en su coche -del cual no nos hemos apartado desde que llegamos- y comienza a subir su mano por entre mi ropa, y ahí esta... El primer tacto de esas manos sumamente varoniles contra mi piel desnuda bajo mis ropas. Comienza a deslizar su mano desde mi cinturca hasta el broche de mi sujetador, trata de deshacerlo... De soltar esos odiosos ganchos que le impiden arrancarmelo, esta por hacerlo pero... Me aparto algo Brusco, safandome de su agarre y pongo las manos sobre su pecho para mantenerlo quieto, puedo sentir su agitada respiración. El me mira confuso y tal ves hasta algo irritado... Oh vamos, que le he cortado asi nada mas.

—¿Que pasa? ¿Te encuentras bien? —me interroga confundido.
¡Pero que pregunta!. Si Tom, si estoy bien, estoy de maravilla... Si estoy Feliz de que hayamos estado apunto de enrrollarnos ¡aqui y ahora!¡Como si se tratase de una cualquiera!

—¿Podrías llevarme al hotel? —hablo antes de arrepentirme

—¿Al hotel? —me mira sorprendido —pensaba estar mas tiempo contigo...

—Lo siento Tom,pero... Necesito pensar un poco
El me mira dudoso ¿Y como no? Si hace apenas unos segundos estaba muy quitada de la pena siguiendole el jueguito.

—De acuerdo, te llevare —dice al tiempo que me abre la puerta del copiloto y se dirige a su lugar detrás del volante.

Tom, es un completo seductor, no hay que ser fan de su banda de rock para poder notar eso, tal vez y hubiera conseguido que nos liáramos aqui mismo. Pero hay otras cosas que me frenan y no son precisamente El. Agradezco a los tres cielos que halla tomado las cosas con suavidad y no se halla cabreado por haberlo dejado asi de agitado como se encontraba.


//TOM//

CONFUSIÓN!! Eso es lo que siento ahora!... ¿Pero que COJONES me pasa? ¿Por que con ella me siento tan vulnerable? ¡Maldita sea!... ¡Soy Tom kaulitz por favor! Cualquier pequeña lloraría por pasar una noche conmigo. soy perfecto para eso, para el amor de una noche, es lo mío, mi fuerte... Simplemente yo. ¿Por que esta niña despierta todo esto en mi? Esas estúpidas ganas de estar con ella todo el tiempo, de cuidarla, de asegurarme yo mismo que no le pase nada, que nadie le haga daño y de ser posible que ni la tocasen.
Lo que me lía es que ni siquiera somos amigos, ni siquiera tengo mucho tiempo de conocerla ¡Y eso es lo peor!... Tengo esta necesidad de protegerla desde el momento en que la vi tan frágil y vulnerable en los brazos de shaggy... Su mirada llena de ternura y confusión, y su rostro con esa odiosa expresión de dolor... Fue lo que me mato, tenía que llevarla yo mismo al hospital, asegurarme que ella estaría bien. Ingenuamente pensé que eso seria todo, ver que saldría bien del hospital seria suficiente para mi (ja, si como no)... No lo fue, no fue suficiente. Después de haberla dejado junto a Elena en el hotel, ese maldito cosquilleo en la boca del estomago... Eran nervios ¿Estaría bien? ¿Podría cuidarla bien Elena?, ella me necesitaría... Agradecí al cielo cuando mi gemelo me aviso que las veríamos en la mañana para enseñarles la ciudad, pero esto no podía seguir asi, necesitaba ganarme su confíanza ¡odio que pase de mi! No lo soporto, que me ignore, que prefiera estar con Bill... Que se lleve mejor con el que conmigo.

Creo que se ha quedado dormida, no se me hace raro es ya tarde y el camino es largo.
Me sobresalto un poco al escuchar mi celular... Es Bill, puedo saberlo sin ver el móvil, es lógico de seguro esta preocupado, echo todo un lío por saber donde me encuentro.

—Tom ¡¿Donde cojones te has metido?!, estamos esperandolos en el hotel ya que nunca me dijiste donde estarías... —grita mi gemelo atravez de la bocina del móvil, justo como esperaba que lo hiciera.

—ya, ya Bill. Ya voy para ya, los veo en un rato

—Mas te vale que asi sea Tom

—Bill, no estoy para discutir. Además estoy conduciendo —y sin dudarlo finalizo la llamada, de seguro Bill me matara mas tarde por haberlo echo pero la verdad es que estoy cansado y no estoy de ánimos como para escuchar sus regaños.


~*~

¿Que debería hacer? ¿Despertarla?... No, no podría. Hemos llegado al hotel hace apenas unos cuantos minutos, se que no le Agrada que la tome en brazos, pero no me queda opción.
Salgo del auto y me dirijo a su lado para abrir la puerta con cuidado de no Despertarla, se ve tan tierna, tan linda, simplemente HERMOSA... '¡vamos tom, este no eres tu!' me regaño mentalmente, ¿Pero que carajos hago? Estoy todo echo una maraña, las mujeres solo son para pasar la noche, no mas, no existe esa tontería llamada amor... No para mi.
Es solo una pequeña niña berrínchuda... ¡Eso es! Tal ves en realidad lo que pasa conmigo es que la veo como un hermano ¡Si! ¡Eso es lo que pasa!, no es que me interese es simplemente que despierta ese instinto protector que despierta Bill en mi por ser el hermano mayor, ¿Por que?, no lo se... Tal ves es el echo que la veo tan frágil y vulnerable, tal ves me recuerda a Bill cuando pequeños.
Paso cuidadosamente un brazo por detrás de su cuello y el otro por debajo de sus rodillas para levantarla. Una vez que la he sacado cierro la puerta con mi pie tratando de hacer el menor ruido posible, pero la niña tiene el sueño ligero ¡Oh vamos! ¿Me he esforzado por nada?.

—¿Tom? —me habla con los ojos achinados —¿Ya hemos llegado?
Comienzo a caminar en dircecion al lobby del hotel ignorandola, pero eso parece un poco imposible.

—No te preocupes, puedes bajarme... Puedo andar yo sola

—bah —resoplo restandole importancia a sus palabras o al simple echo de que ella piense que para mi es un lío tomarla en brazos y llevarla -creo que se me esta haciendo costumbre eso de cargarla- tal ves si me causara molestia solo no la cargaría ¿O si? —Ya estamos aqui, además he olvidado tus muletas en el auto y no pienso regresar por ellas ahora.

—oh... Y entonces ¿Prefieres dar doble vuelta Sr. Inteligente? —me mira con una mirada de superioridad y una sonrisa picara al mismo tiempo. Cree haber ganado ja!!! Si como no. ¿Eso es lo que quiere? Pues bien, regresemos al auto.

—Bien... Iremos por tus muletas ahora —sonrio simulando derrota, valla que esto será divertido. Adoro verla haciendo berrinches y de seguro es lo que hará.

Estábamos frente a las puertas del elevador. Me doy la vuelta y me dirijo a la puerta de salida que da a el estacionamiento para ir por sus muletas ¡Ja, que ya me la imagino!.
Cruzo las puertas de la salida y volteo al sentir una mirada sobre mi. Es un chico Rubio, de ojos azules, bien parecido pero por supuesto que a kilómetros de compararse conmigo, no le tomo mucha importancia hasta que pronuncia el nombre de Eimy... Eso si me toma desprevenido ¿Que no se supone que no conocen a nadie mas aqui en Berlín?.
Eimy se incorpora tan rápido y desesperadamente que hace que perdamos el equilibrio y estemos apunto de azotar las narices contra el suelo.

—Hey tranquila pequeña —le hablo para regañarla un poco mientras la sostengo firme de la cintura.

—¿jhonny? —Se dirige Eimy al tipo Rubio, pasando completamente de mi comentario —¿Pero que haces tu aqui?.

—Vine a hablar contigo, necesitamos aclara algunas cosas... —Bien, al parecer no es simplemente un extraño.

—No... Este no es momento ni lugar. Estoy aqui, tranquila y así quiero que continúe todo. TRANQUILO. —Eimy comienza a alzar un poco la voz. No se de donde se conocen o que hay entre ellos pero sin duda ella no le es grata su presencia 'genial' digo para mi. Subo la mano que reposa sobre su cintura y la abrazo, frotando levemente su hombro para tranquilizarla.

—Eimy, no pienso discutir esto aquí y menos Con este gilipollas metiendo las narices en donde no debe.

Ok... En cualquier otro caso ya hubiera dado dos o tres pasos para poder romperle el osico, Si no lo hago es solo por Eimy, para evitar meterla en problemas. Fácil no es, no soy de los tipos que se dejan insultar asi nada mas.

—¡Basta! ¡No puedes venir aqui a insultarlo!... Vete, no quiero verte... Ni ahora, ni nunca —espero que sea mi idea. La voz de Eimy empieza a quebrarse al hablar, y si es por este idiota no podré contenerme.

—¡¿Lo defiendes?! ¿En tan poco tiempo me conseguiste un remplazo amor? —Dice con sarcasmo. Me agarra desprevenido y se hacerca a Eimy desde su costado izquierdo -exactamente el lado contrario al que me encuentro- mi cerebro trata de procesar... '¿En tan poco tiempo me conseguiste un remplazo amor?'. ¿Que cojones significa eso? ¿Este gilipollas ha sido su novio antes? —¡Eres una maldita puta Eimy! —Le dice mientras la arrastra, prácticamente arrebatandola de mi lado y haciéndome regresar a la realidad de un trancazo.

Eimy gime de dolor entre los brazos de ese gilipollas mientras la zarandea estrujando el brazo por el cual la ha tomado y no puedo mas... La ira sube hasta mi cabeza evitando que piense claramente. Lo sostengo tan fuerte de la muñeca obligandolo a dejarla. Aparto a Eimy de su lado y la hubico detras de mi, fuera de su alcance pero es demasiado tarde. Sin pensar... Le pego a puño cerrado justo en la nariz.
Al verlo se me hace imposible ocultar una sonrisa de satisfacción, la sangre recorre su rostro manchando su polera, en un pequeño momento cruza por mi mente 'es suficiente Tom, con eso basta' pero no me importa. Sin pensarlo mas lo levanto tomandolo bruscamente de sus ropas para poder golpearlo de nuevo.

—¡Tom¡ —no me importa quien grita mi nombre, que se valla al carajo —¡¿Tom?!... ¡Basta ya déjalo tranquilo! —Me grita Bill desesperado apartandome de ese imbécil.

–¡Sueltame Ya Bill! —Casi le arranco mi camisa de entre sus manos. Busco a Eimy, ignorando completamente a Bill y al idiota llorón que reclama no se que tantas tonterías ya que las grita en otro idioma, a mi parecer es español.

No puedo evitar sentir un dolor punzante en el pecho cuando la veo. Sus hermosos ojos, rojos e irritados, llenos de miedo y confusión. Me quedo de pie no demasiado cerca pero tampoco lejos. Solo la observo, abrazada a Elena, aferrada a ella... No se que es lo que dice ya que le habla a Elena en Español pero sus palabras destilan desesperación.

–Eimy... —la llamo temeroso, mientras me dirijo a donde se encuentra ella. Por un instante pienso que no me hará el mas mínimo caso pero... Cuando me ve se lanza a mis brazos aferrandose a mi. Rodeando fuertemente mis caderas con esos brazos tan delicados. Yo la rodeo por los hombros y la aprieto fuerte contra mi pecho —Tranquila pequeña, ya paso... Tranquilizare, No... No llores mas por favor —No soporto que llore.

Solo de verla asi me dan ganas de regresar con el idiota llorón para terminar de romperle la cara. Bill se hacerca a nosotros, supongo que para asegurarse de que Eimy se encuentra bien. Al idiota ese se lo llevan los de seguridad, mientras grita un par de estupideces mas y se asegura de que las entienda gritándomelas en ingles.

—Lo siento... —susurra Eimy, con la cara escondida entre mis brazos. ¿Pero que carajos dice? ¿Que lo siente?. El imbécil es el que debería disculparse, no ella.

—Tu no tienes la culpa Eimy —me gana las palabras mi muy sonso hermano gemelo —no te sientas así, ven te acompañaremos hasta tu habitación...

—Gracias Bill... —hace intento por separarse de mi y darle la mano a Bill, pero no lo permito. Me mira extraño pero no dice nada. La sujeto de la mano y camino en dirección al elevador para poder acompañarla hasta su habitación...

No hay comentarios:

Publicar un comentario